Seguimos con las historias que circulan por la red, y esta es muy especial porque sé de buena tinta que es real como la vida misma, porque mis amigos que trabajan en un hospital, lo ven casi todos los días cuando se enfrentan a serias enfermedades.
Tiene su moraleja, pero como siempre la dejo para el final.
Comienza así:
Hace muchos años, recuerdo cuando trabajaba como voluntario en un Hospital de una Clínica Universitaria, conocí a una niña llamada Lucia, quien sufría una extraña enfermedad y la única opción de seguir con vida era recibir una transfusión de sangre de su hermano mayor que tenía en aquél momento tan solo 5 años, y que había desarrollado anticuerpos de la misma enfermedad, porque sobrevivió a la misma hacía dos años.
Estaba a su lado, cuando el DOCTOR le explicó la situación, y le preguntó ¿ESTARÍAS DISPUESTO A DAR TU SANGRE A TU HERMANA?, el pequeño dubitativo en un principio, pero con firmeza respondió “SI SEÑOR, LO HARÉ, SI ESO SALVA A LUCÍA”.
Entonces comenzó la transfusión, en una cama su hermana Lucía iba recibiendo la sangre de su hermano, que en la cama de al lado sonreía, deseando la salvación de su hermana, pero a los pocos minutos comenzó a ponerse blanco, con un sudor frio, quedó muy serio y casi como un susurro le dijo al Doctor: ¿Cuándo COMENZARÉ A MORIRME?
Este niño, no había entendido la explicación del doctor y se pensaba que donaría toda su sangre a su hermana si así esta se podría salvar, y aun sabiendo que así moriría, contestó que se la daba.
Por supuesto que se recuperó del susto y su hermana sanó, y ahora os cuento esta historia para que…
DA TODO POR QUIEN AMES, aunque no lo entiendas, y saca tu propia moraleja.
Es una historia preciosa...
ResponderEliminarEs un cuento, pero como bien dices estas cosas se dan en la realidad todos los dias, y es por ello por lo que el ser humano es increible.
Un saludo ;)
Yo lo daría todo por un hermano. Yo daría lo que fuese por salvar a uno de mis hermanos en caso de que lo necesitara de mi. Ellos ya me lo han demostrado a mi en muchas ocasiones. NO veo por que no hacerlo. Yo merezco vivir tanto como ellos pero... Yo moriria si es necesario para salvar la vida de cualquiera de ellos sin pensarlo eh. No le temo a la muerte. Le temo mas a la vida :-)
ResponderEliminarSaludos para todos.
Otra vez me ha emocionado, yo daría mi vida por lo que más quiero, que es mi hija Laia, así que comprendo el sentimiento.
ResponderEliminarNo solo los humanos hacemos estas cosas, encontré esta historia hace tiempo y me emocionó mucho, la quiero compartir con vosotros:
http://losirracionales.blogspot.com/2008/01/ms-all-de-la-muerte.html
Saludos.
bonita historia
ResponderEliminarEn los hospitales pasan cosas muy curiosas, recuerdo una vez que llevamos a mi abuelo a urgencias porque se puso muy malo.
Lo tenían en un box, o como se llamen esas salas, junto con otro enfermo bastante más joven que él.
En un momento de desesperación por el dolor que tenía, mi abuelo pidió a gritos que le diesen algo para el dolor y que lo dejasen morir.
Cuando el enfermo que esta al lado lo oyo, le echo un responso y media bronca a mi abuelo: no diga eso, la vida es bella, hay que vivir y otras cosas por el estilo.
Al cabo de un rato la señora que acompañaba a ese hombre nos contó que lo habían llevado allí porque había intentado suicidarse.
Vivir para ver
Manolo, eso es humor, el autentico humor Español.
ResponderEliminarUn saludo y me alegro de que ha todos os gusten este tipo de historias.