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6 de septiembre de 2011

Leyenda o Historia de un personaje Histórico

Caemos muchas veces en el craso error de que el Cid Campeador no existió y es un producto de la imaginación de algún escritor.

Sobre D. Rodrigo Díaz de Vivar podemos afirmar algo históricamente cierto y es que existió y sin lugar a ninguna duda fueron sus hazañas en el campo de batalla y su forma de interpretar el honor las que dieron paso a la leyenda, en forma de Cantar, el Cantar del Mío Cid.


Nació Rodrigo muy cerca de Burgos, en Vivar, corría el año 1043 posiblemente, son pocos los datos que tenemos, era hijo de un infantón y una noble de la época, así que su vida estaría destinada a ser todo un caballero de armas.

Pero ya en su niñez sufrió la desgracia de quedar huérfano y quedó al amparo de sus educadores en palacio, lugar de instrucción para el manejo de las armas, el combate cuerpo a cuerpo, estrategias en la batalla y sobre todo escuela de saber, privilegiada para unos pocos notables de la época, entre ellos su compañero inseparable de niñez, el infante Sancho.

Era pues un niño que aprendió a ser hombre en la soledad de una Escuela Medieval y que en Sancho encontró a uno de sus mejores amigos, tanta amistad desbordaban el uno por el otro que cuando ya fue Rey Sancho, a Rodrigo le hizo su Alférez y fue mano derecha de su reino.

Debemos separar siempre en la medida de lo posible la historia de la literatura para entender a este personaje histórico, que de su vida sabemos muchas veces lo que intuimos pudo pasar pero distinguimos lo inventado para enaltecer un personaje, algo típico cuando se cuentan sus gestas.

De su infancia sabemos bien poco, casi nada, pero sí podemos imaginar esas escuelas medievales en la que se preparaban para la guerra y cultivaban la educación del saber con clases interminables de instrucción y letras por doquier, incluidas todas la leyes de la época.

Intuímos que la personalidad del Cid se forjó en esa niñez huérfana y que a raíz de su buena amistad con Sancho, toda su vida que aquí contaremos se basó en el honor de la palabra de un hombre y sus consecuencias hasta el último extremo.

Hoy para finalizar les pediría a esos directivos de televisión, que en España tenemos estupendos personajes para divertir a nuestros hijos y enseñarles algo de historia, como los dibujos animados del vídeo, pero no seremos oídos ya que la programación infantil en España dejó de existir hace tiempo.

8 comentarios:

  1. Historia pura y dura su existencia. Otra cosa es la leyenda que se forjó alrededor de su figura.

    100% tu recomendación a directivos, pero mientras no sea rentable...

    Un abrazo

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  2. Los que somos de Petrer tenemos muy presente la historia del cid. La gran montaña que nos protege la ciudad tiene el mismo nombre.
    Esta es la leyenda de nuestra montaña relacionada con el Cid y su caballo:
    http://boards2.melodysoft.com/jacobeoinfo.caminosdelevante/leyenda-de-la-pata-del-caballo-de-110.html
    Un saludo amiguete.

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  3. No me harán caso Javier, que pena de Televisión.

    Un abrazo amigo.

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  4. Logio me lo estaba imaginando, ja,ja,ja.

    Un abrazo.

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  5. Josete querido amigo, como me alegro de tu vuelta, espero que todo bien y sobre tu aporte maravilloso, esas leyendas dieron siempre valentía a cualquier soldado español.

    Un abrazo amigo.

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  6. Existir se dice que existio...Como tambien se dice ( en libracos de historia que no precisamente son los mismos que se emplean en educacion ) que era un mercenario, honor poco y en la famosa batalla que gano una vez muerto, sus enemigos huian por que conocian el dato de su muerte , de peste.

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  7. Querido anónimo, no sólo existió, llegó a tener un reino muy importante y clave en aquella época para los intereses cristianos.

    Un abrazo.

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