No suelo mirar mucho eso de las estadísticas, pero cuando lo hago me sorprendo siempre y es que muchas de ellas mienten más que Zapatero hablando de economía.
Hace unas semanas en el blog de poemas me encontré con que alguna entrada había tenido 0 visitas y eso era imposible pues contaba con 10 comentarios, así que me imagino que igual no computa el algoritmo empleado por los robots.
Hoy entretenido con las estadísticas de este rincón, me encuentro que esta semana hablando de Historia los visitantes se han reducido notablemente o que simplemente el Cid Campeador es un héroe nacional y en muchos países no les interesa lo más mínimo eso que de él contemos por aquí.
Lo que no saben esos que dejaron de llegar es que en la Edad Media el humor y la picaresca existían y en este rincón nunca nos hemos achantado ante un grandioso vídeo que les hará sonreír un buen rato.
La historia tiene dos protagonistas, un cinturón de castidad y un cerrajero muy apañado, así que no se lo cuento y les dejo con humor en la Edad Media para mañana seguir hablando de D. Rodrigo de Vivar.
Sobreactua la víctima.
ResponderEliminarPues ahora Logio piensa en aquella época y los sudores fríos que pasaban los herreros.
ResponderEliminarUna brazo.
No termino de tener claro quién es la víctima en esta situación... En cuanto al empleo de cinturones de castidad en la Edad Media, todo parece indicar que se trataba de un mito no muy bien fundamentado. Las mujeres no podían llevarlo durante todo el tiempo en que sus maridos combatiesen en las Cruzadas porque morirían de infecciones y rozaduras con el metal. De manera voluntaria lo usaban algunas mujeres en momentos excepcionales para evitar ser violadas, pero sólo durante unas horas.
ResponderEliminarUn abrazo tinerfeño, sin estadísticas.
CC
Senovilla leo tus artículos sobre el Cid. No comento porque estoy fuera de casa con una conexión USB y me falla mucho la cobertura.
ResponderEliminarSudo el tio,un poco inutil se ve que era,porque a los candados dandole un golpe por los lados suelen saltar.
ResponderEliminarTienes mas comentarios cuando la cosa no es seria....
CC, por lo que sudaba el cerrajero creo que la víctima somos nosotros pues las risas nos parten, ja,ja,ja.
ResponderEliminarUn abrazo sin estadísticas, los fieles no me fallan nunca, los infieles con el Cid en cabeza tampoco me dan miedo, ja,ja,ja. ;-))
Kassiopea ya he visto esta tarde unas preciosa fotos, así que sigue disfrutando y compartiendo todo eso que ves.
ResponderEliminarUn abrazo
Gonzalo, los comentarios y las estadísticas no me preocupan, creo que fallan más que una escopeta de feria barata, lo que me hace gracia es lo que acabas de mencionar, con seriedad la gente participa menos ja,ja,ja voy a tener que ser más alocado aún.
ResponderEliminarUn abrazo.
Un carrajero que pica como un tonto, aunque se puede pensar que ya estaba la cosa amañada. ¡Quién sabe!
ResponderEliminarLo de comentar o no es un tema más complicado. Depende del tiempo disponible, de si tienes algo interesante que decir al respecto. A veces se leen las entradas y no se dice nada. Hoy es fiesta en mi localidad y ando más libre (Lo digo porque puede haber alguien que piense que estoy haciendo esto desde el trabajo. Jejeje)
Un saludo.
Si es que en la Edad Media las cosas se hacían a conciencia...
ResponderEliminarY a buen seguro Javier también gozaban de buen humor entre batalla y batalla.
ResponderEliminarUn abrazo.
Cayetano, en sí no iba por los comentarios, las visitas son peores según el tema tocado, pero bueno tampoco valen de mucho a estas alturas.
ResponderEliminarY eso dilo bien alto que habrá alguno que piense mal, ja,ja,ja.
Disfruta de esos días libres con intensidad, el curso comienza con fuerza y....Un abrazo.