Que escaso ando de tiempo últimamente, son rachas de estas que te absorbe todo lo que tienes pendiente y te deja sin minutos para el ocio del blog y las redes sociales.
Por ello pido disculpas si muchos comentarios dejados en este vuestro rincón no son contestados, pero os aseguro que sí son leídos y sobre todo apreciados.
Bueno hoy he sacado un rato para soplar y secar un poco más un cuadro que mi buen amigo Manolo, un loco encantador que no es lo mismo que un encantador loco ha realizado como regalo de comunión a mis peques.
Los viejos lectores de este rincón le conocen bien a Manolo y saben que es un gallego muy especial que siempre estuvo, está y estará cerca de todos los que quieran leer su M@nologos
Manolo es un componente de esa vieja cuadrilla de amigos que aún pasados tantos años, siguen presentes siempre en mis lecturas favoritas, a los que vas conociendo más profundamente cuando les lees entre líneas y conoces mejor su "personalidad".
Hoy he pasado de nuevo a soplar porque se está secando un cuadro que ya es famoso por el hecho de que se ha pintado con el corazón, el corazón de un hombre que ante la desesperación ha decidido luchar y luchar y eso hace que le aprecie aún más.
Y de paso aprovecho para dar las gracias a este amigo con el que nunca podré olvidar que la red te deja amistades de esas que son buenas, buenas, de verdad, gracias M@nologos por estar ahí.
No todos los días le regalan a uno un cuadro.
ResponderEliminarFelicidades.
Muchísimas gracias, aquí estoy y aquí seguiré aunque por culpa de este trasto de ordenador que tengo tenga que escribir mis entradas a mano.
ResponderEliminarSaludos, besos, abrazos y sobre todo, muchísimas gracias por ser mi amigo.