España está sumergida en una grave enfermedad que todos conocemos como Angustia, los empresarios se angustian porque no consiguen crédito para seguir manteniendo sus empresas, porque no consiguen cobrar todo lo que facturan y ese maldito IVA que deben anticipar. Esta angustia se la transmiten a los trabajadores que cada vez se sienten más presionados y temerosos con su futuro, ellos no pueden hacer nada y la impotencia de empresarios y trabajadores se convierte en la mayor de las angustias en la que no ven salida a esta situación.
Los trabajadores en general acuden a su puesto de trabajo con miedo, unos por si de un decretazo les eliminan la paga extra, otros por si les reducen el sueldo, otros por si declaran un temido ERE y los más por si son despedidos ya que su contrato es muy precario. Todos viven su jornada laboral con una angustia intensa en la que cualquier macutazo es capaz de acelerar el ritmo cardiaco.
Los parados se amargan con cada amanecer, ya han cubierto de curriculum todo lo habido y por haber, siguen poniendo mucho de su parte por ser optimistas pero al atardecer la angustia se apodera de ellos y se acuestan para revolverse entre sus temores que no ven un futuro de dignidad laboral.
Estudiantes que están a punto de finalizar el curso y son conscientes que sus padres no van a poder financiar esos estudios que aún les quedan en su formación, se preparan con ansiedad para intentar que la nota como mínimo alivien en parte esa carga financiera que van a llevar a su casa sabedores que igual ni con ese esfuerzo podrán seguir formándose. La angustia es tan poderosa en estos jóvenes que por mucho saber y títulos que ya poseen ven una salida indigna a su ya vieja juventud educativa.
Los jubilados no dan ya mucho de sí, están volcados en ayudar a sus hijos que con hijos están en el paro y aunque aquello de que dónde comen dos comen tres está muy bien para una eventualidad pasajera, pero en el día a día las carencias van mellando con angustia su salud. Ellos lo han dado todo por este país a base de sudor laboral y esfuerzo social para que España tuviera esa Democracia tan envidiada y ese bienestar tan perdido, pero al anochecer el viejo le dice a su viejecita, nosotros a pesar de todo hemos de seguir, si caemos nosotros ellos se quedan sin nada, nuestros hijos dependen aún de nosotros y eso que ya tienen más de 45 años.
Los Políticos, a pesar de que hay mucho sinvergüenza, no lo son todos, por lo que los que de verdad se preocupan de encontrar soluciones simplemente por impotencia se limitan a esconder los problemas con parches y sin duda alguna es el peor remedio para contrarrestar la angustia; esta medicina de decretos y directrices europeas lo único que hacen es empeorar la situación.
Angustia es la enfermedad que tiene España y no podemos disfrazarla con otros nombres, no debemos seguir poniendo parches para ocultar sus efectos, ni tan siquiera podemos soñar con que Europa ponga un remedio.
Simplemente amigos tenemos que empezar por reconocer que esas situaciones que nos angustian existen y que aunque no podamos evitarlas hemos de intentar asumirlas y conseguir que no sean fruto de una enfermedad que será incurable si de nuestra parte no ponemos todo lo que tenemos, aunque simplemente sea esperanza.
Esta crisis está cambiando un modo de vida, un modo de trabajo, un sistema social y lo peor de todo es que va a dejar millones de dagnificados que será muy difícilmente recuperables.
Y hemos de hacer amigos todo lo que podemos y así nunca nadie nos echará en cara que no hicimos todo lo que pudimos.
Ánimo para todos y pensar que al final tras la noche viene de nuevo el día y si nuestros problema lo entendemos la angustia no hará mella en nuestra salud.
Entre todos sacaremos esto adelante, ya veras como sí, compi. Un abrazo
ResponderEliminarNuestro problema está muy claro, pero esperanza no nos queda.
ResponderEliminar"Aunque no podamos evitarlas hemos de intentar asumirlas". Lo siento, pero no me resigno a ello. Creo que sí se podrían evitar ciertas cosas. Hay muchos aprovechados que se están beneficiando de la crisis y se están forrando. Habría que meter en la cárcel a todos los defraudadores, a los que se llevan el dinero a bancos alemanes, a los que deslozalizan sus indistrias para llevárselas a países pobres donde la mano de obra es más barata, habiendo cobrado antes subvenciones con dinero público, a los banqueros desalmados y estafadores, a los que se aprovechan del miedo ajeno para hacer ajustes, recortes y otras faenas al personal. ¿Por qué hay sinvergüenzas andando por la calle y no están en la cárcel? ¿Qué hacen libres sujetos como Urdangarín o Bárcenas? El problema es que tenemos dos partidos mayoritarios que se saben poner de acuerdo cuando les interesa, pero que no dudan en bajarse los pantalones frente a los que mandan en Europa. Y así no vamos a ninguna parte. Creo que lo peor que podemos hacer es tirar la toalla y resignarnos. Eso es lo que quieren.
ResponderEliminarUn saludo.
Costampla claro que lo sacaremos amigo, pero sin duda van a quedar muchas secuelas.
ResponderEliminarUn abrazo.
Tengo pendiente contestarte un comentario en el blog de poesía, pero necesito algo elemental y fundamental que es "tiempo".
Ines eso de la esperanza es lo último que nos pueden robar y aunque a diario lo intentan espero y deseo que no lo consigan.
ResponderEliminarUn abrazo.
Cayetano la mejor cura para la angustia es reconocer el problema y aunque parezca insalvable en la medida de lo posible asumirlo. Es mejor que estar drogado con cualquier medicación.
ResponderEliminarSobre el resto, totalmente de acuerdo con usted querido amigo, pero sin banderas republicanas que aún no las entiendo ;-))
Un abrazo
Yo me pregunto cuando acabe esta situación de crisis ¿dónde estaremos? ¿qué sueldos cobraremos, si trabajamos para entonces? ¿qué pensiones cobrarán los jubilados? Me cuesta luchar contra esa angustia que dices, pero más me cuesta creer que esta casta política que tenemos nos saque de esta situación, quizás perdamos esa angustia el día que nos atrevamos a descabalgar a estos plíticas y refundar nuestro sistema político.
ResponderEliminarUn saludo.