Muchos días ante la cantidad de fiestas y creencias religiosas que tiene este país escuchamos que todo el mundo ese día va a ver alguna de las miles de reliquias que por estas tierras conservamos como auténticos tesoros.
Las más llamativas son sin duda alguna las reliquias humanas incorruptas, esas que conservan en una especie de momificación perfecta partes del cadáver intactas a pesar del paso del tiempo que lo devora todo.
Los últimos estudios científicos indican que nuestros cuerpos cuando pasan a mejor vida tienen a retardar la corrupción de la carne ya que posiblemente la cantidad de conservantes y aditivos que ingerimos en nuestra alimentación contribuya a que pudrirnos en el ataúd cueste cada vez más.
Así que cuando pasemos al otro lado de este mundo tendremos cuerpos eternos, incorruptos como la cantidad de reliquias que conservamos en este país, la química es poderosa hasta cuando la muerte nos llegue.
Y es que ya decía mi abuela, somos lo que comemos y nuestros cuerpos no podrán ocultarlo ni cuando estemos bajo tierra.
No, si al final van a tener que enterrarnos con un símbolo de "peligro biológico" pegado al ataúd, junto con una lista de los conservantes y colorantes que llevamos en el cuerpo. Como una vulgar lata de conservas, vamos.
ResponderEliminarUn abrazo.
Más o menos amigo Rodericus, ese es el destino a causa de lo que comemos, lo bueno que dentro de unos siglos algunos seremos reliquias incorruptas.
ResponderEliminarUn abrazo
Vamos, que el brazo incorrupto de Santa Teresa o la momia de Lenin a nuestro lado van a parecer aprendices.
ResponderEliminarUn saludo.
Discrepo de la creencia de que lo que comemos o lo que nos medicamos nos vaya a mantener intactos despues de la muerte.
ResponderEliminarUn médico que conozco sostiene lo contrario,dice que un cuerpo medicado se descompone mucho antes que uno que al que ni siquiera le gustase tomarse una aspirina.
Yo personalmente ya tengo pensado como quiero irme de este mundo y desde luego no será pudriendome en una fosa contaminando los acuíferos.
Cayetano me encantan este tipo de estudios científicos en los que buscan explicación a todo.
ResponderEliminarUn abrazo
Ines no hay que temer a lo que pasa después de la muerte con nuestros cuerpos, ya nos tiene que dar igual...lo que hay que pensar es si de verdad hay algo más para el espíritu o el alma.
ResponderEliminarUn abrazo
El chiste final del vídeo bien vale una entrada, jjjj.
ResponderEliminarCon la incineración no habrá problema.
ResponderEliminarFeliz semana Jose.
El chiste Eulogio es antológico, ja,ja,ja.
ResponderEliminarUn abrazo
MPMoreno, puestos a investigar seguro que miran estos científicos si nuestros cuerpos arden más deprisa o más despacio por todo aquello químico que comemos.
ResponderEliminarUn abrazo.