Generalizar siempre fue malo ya que atacar cualquier tipo de institución conlleva hacer daño a las personas que hacen bien su labor y hoy como muestra les voy a dejar un botón.
Aquél hombre llamado Ángel tomó el camino del seminario mientras sus amigos nos íbamos a cumplir el Servicio Militar, en aquellos tiempos no estaba mal visto eso de querer ser cura y se sabía sobradamente que el nivel de estudios requeridos era especialmente alto para los que habíamos terminado el bachiller.
Pasados los años este Ángel consiguió sus sueños y le tocó dar misas en varios pueblos a la vez y según contaban amigos comunes, era feliz con lo que hacía aunque pocos conocían realmente sus sacrificios personales.
De aquella época tenía una asignación mensual para gasolina y así poderse desplazar de pueblo en pueblo para dar misa aquí y allá, pero su generosidad y forma de ser le impedía pecar en semejante gasto y se iba en bicicleta o con algún paisano que aprovechando el viaje se ofrecía a llevarle. Ese dinero que ahorraba de su gasolina lo empleaba sabiamente en ayudar a los que más lo necesitaban.
Era época socialista y comenzó a tener un pequeño sueldo, del cual no gastaba casi nada ya que siempre (contado por gente de esos pueblos) empleaba aquellas pesetas en familias muy necesitadas.
No hablamos de ningún santo, era un cura más, era un amigo de juventud que vino una vez a celebrar una boda de un amigo común y fue de esas homilías que uno no olvida nunca, incluida la gracia de su discurso en el que nos decía a todos "No tengan ustedes prisas por ir a comer, esto de hoy es algo muy especial para los que se casan y hay que hacerlo bien"; más de hora y media con guitarra incluida y haciendo cantar al más pintado para luego acudir al banquete ceremonial.
Allí en el restaurante parece que le esté viendo ahora mismo con su camisa llena de flores extravagantes y bailando sevillanas como el que más, un tipo de lo más feliz sin duda alguna.
Fue precisamente en esa boda cuando nos contaron su forma de actuar con anécdotas tan pintorescas que a día de hoy se merecen una reflexión; andaba un día mal de zapatos, bueno así todos los días del año, por ello que su hermano le llevó de compras y le regaló unos zapatos decentes, en la tienda pidió que los viejos se los pusieran en la caja y salió de ella con los nuevos.
¿Nada especial verdad?, pues sí, muy especial ya que al pasear por la ciudad su hermano observaba que a todo el que estaba en la calle pidiendo le preguntaba algo, dejaba alguna moneda y volvía a hacer lo mismo con el siguiente.
Su hermano acostumbrado a la forma de ser de Ángel no le dio mucha importancia hasta que de pronto vio como este cura se descalzaba, entregaba sus zapatos nuevos a un mendigo y tranquilamente habría su caja para volver a su empeine aquellos viejos que tantos y tantos años le acompañaron.
Con su hermano casi se pelearon por tal acción, pero él siempre convencía con el corazón y mostró que aquellos zapatos le eran más útiles a ese hombre casi sin fe en la vida y que a él mismo esa fe le sobraba a raudales.
Sus padres acostumbraban a visitarle en el pueblo y un año le regalaron unos somieres para las camas donde ellos no acababan de dormir bien nunca hasta ese día, pero al año siguiente la madre le dijo al padre "¿Oye, no notas nada raro?" Sí dijo él, levanto los colchones y comprobó que había puerta de madera en vez de somier, Ángel lo había vuelto a hacer, encontró una familia que los necesitaba más que él.
El tiempo siguió pasando y me enteré hace poco que debe estar este amigo en tierras de Perú haciendo de misionero, extrañado pregunté porqué esa decisión y es que al parecer en las cuentas de la iglesia había una partida de dinero que él tenía pensado gastar en lo de siempre pero que al enterarse en el obispado le obligaron a que ese dinero fuera allí depositado para ser gestionado por la jerarquía... Así lo hizo y así comenzó su huída hacia adelante en su fe y por ello debe estar en tierras de Perú.
Existe una gran diferencia entre personas e instituciones, mezclar y agitar para sacar sonrisas sarcásticas es la mayor de las ignorancias hacia las instituciones y la peor de las humillaciones hacia las personas.
Hoy Ángel me has hecho recordar tiempos de instituto y aquellas tardes de juego y bromas que siempre teníamos, pero también me ha permitido reflexionar para compartir su pequeña historia con los lectores que a buen seguro han comprobado la gran diferencia entre personas e instituciones, a cada una lo que le corresponde.
Amigo Senovilla y como ese señor cuantos hay? Yo no conoci pero lo se porque mi suegro y mi cuñado lo contaban que muchos años antes de entrar yo en la mina en el mismo pozo trabajo el cura del pueblo,y te puedes imaginar lo que es trabajar en esas condiciones cuando te das un golpe bajan todos los santos,y ese señor la paga del gobierno la daba a los necesitados y parte de el suedo,pero cuantos hay de esos?? Porque de los otros se podria contar de todo y un poco mas...
ResponderEliminarYo a la gente como ese señor lo admiro porque viven conscientes de lo que son y son dignos de respeto esa es la verdadera religion....Lo demas lo pinto muy bien Jesus cuando echo del templo a los fariseos aunque ahora los tendria que echar con metralleta no con latigo..
Un abrazo
No soy capaz de comprender el ataque visceral que existe contra la iglesia y todo lo que representa, sin ser capaces de reconocer su lado positivo y amable, que es inmensamente mayor que los errores por los que se le pretende juzgar.
ResponderEliminarSergio,no es ataque visceral a la iglesia.Yo y muchos no creyentes como yo no entendemos porque en un pais que se declara aconfesional con mis impuestos estemos financiando a estos señores.Quiten esa financiacion y todos felices.No me gusta la formula 1 pero como no la pago no me molesta.....
ResponderEliminarTodas las generalizaciones son peligrosas y no son justas.
ResponderEliminarY todos tendemos a criticar a lo fácil y a lo bestia a ciertos colectivos a los que los medios han vendido como objetivo fácil para aliviar la frustración y la ira colectiva provocada por la omnipresente crisis.
Creo que cualquiera que razone mínimamente se da cuenta de ello. Y también de que existen muchas personas admirables y otras muchas más que sin llegar a los límites de tu amigo cura, pueden tener la conciencia bien tranquila y sentirse orgullosas de su esfuerzo y trabajo diario. Yo diría que son la mayoría.
Gonzalo malos hay en todos los lados e inconscientes también como esos mineros que han causado un herido grave... Pero no deberíamos generalizar tanto sobre todo cuando eso de que financiamos la iglesia no es del todo cierto hay unas contra-prestaciones muy interesantes para el Estado que no puede permitirse perderlas.
ResponderEliminarUn abrazo amigo.
Sergio son cosas "políticas y de ciertas cadenas especializadas en los sarcasmos".
ResponderEliminarUn abrazo.
Gonzalo la Formula 1 la pagas y bien cara por cierto, pregunta a los valencianos.
ResponderEliminarUn abrazo.
LaLolaSh efectivamente que hay gente indeseable en cualquier colectivo, pero como bien dices la válvula de escape es ese ataque fácil y difícil de justificar por la ignoraría que transmiten, en especial en alguna cadena de televisión.
ResponderEliminarUn abrazo.
Sin animo de polemizar cuales son esas contraprestaciones que nos da la iglesia tan interesantes?
ResponderEliminarComo lo explicaria yo,para no molestar...El que quiera iglesia pues que la pague pero no con mi dinero,claro y simple...Se que pago otras cosas que ni me van ni me vienen pero....es lo que hay,no soy creyente y nunca lo sere por lo menos de esta iglesia,si tengo que creer creere en alguien que me demuestre que hay algo en que creer no en esto que hay montado...
Siento ser como soy,pero soy asi...
Un abrazo
Gonzalo dime primero cual es ese costo que mencionas de la iglesia y en base a esos datos decimos las contraprestaciones.
ResponderEliminarUn abrazo y no cambies hombre que cada uno es como es y eso es inevitable ;-))
10.000 millones anuales por el famoso concordato,el ahorro en el IBI unos 3.000 millones,y alguno habra mas
ResponderEliminarTengo yo por amigo, aunque hace años que no le veo, a otro clérigo de iguales pareceres al tuyo. Le conocí en la primera juventud. Era hombre de ideas muy izquierdosas y coincidió en el pueblo con un párroco que era buen hombre, pero más del Opus que Escrivá de Balaguer. Y no veas los pollos que montaban, una por la derecha y el otro por la izquierda. De cualquier manera, en personas como estas está la esencia de lo que debe ser el proceder de lo que Cristo enseñó. Lo demás,santos, sotanas y casullas, con sus opulentas riquezas, sobra y está de más. Un abrazo Senovilla, o mejor decir Estefanía por aquello del ser tan prolífico
ResponderEliminarEstas personas me merecen todo el respeto y admiración, porque son completamente consecuentes con sus ideales. Ya sé que no es la admiración lo que buscan, ni el aplauso; actúan en silencio y en el anonimato. Siento que sus jefes no le dejaran seguir ejerciendo su labor, en vez de ponerlo de ejemplo para otros le piden el dinero :(
ResponderEliminarMauro ya sabes que debemos tener amigos hasta en el infierno, así que alguno de esos del Opus ya conozco también, ja,ja,ja.
ResponderEliminarNo escribo tanto amigo, ya quisiera tener más tiempo, a veces hasta para los comentarios no llego y se dejan sin respuesta.
Un abrazo amigo.
M.P.Moreno esa es la pena, pero aún así en las altas esferas también hay gente como esta que describo por ello juzgar a todos por igual tanto para un lado u otro no es justo para ninguno y mucho menos para la institución.
ResponderEliminarUn abrazo.
Gonzalo yo con los amigos no discuto así que ahí va la propuesta, prepara un post con tus alegatos y este amigo te contestará en otro con sus alegatos, así descargamos esa adrenalina sin enfadarnos, ja,ja,ja,ja.
ResponderEliminarSeguro que queda divertido, te propondría un debate como otros en que he participado en algún blog con (contra) algún amigo pero nos haría falta alguien que nos invitase a tenerlo en su rincón, así que ya sabes cualquiera de las dos opciones me parecen bien para hablar de ese dinero, del concordato y del IBI y hasta de las SEXTA si es necesario ;-))
Un abrazo amigo.
Porque una cosa son las instituciones, los credos y las ideologías y otras las personas. Hay gente buena y mala de todo tipo y condición. El hábito no hace al monje.
ResponderEliminarUn saludo.
Qué maravilloso personaje este amigo...
ResponderEliminarSenovilla me ha gustado esta historia de la que deberíamos de aprender casi todos...
Besotes de lindo fin de semana Senovilla,
Las personas siempre estarán por encima de las instituciones... no tienen alma ni sentimientos, son frías y, además, distantes.
ResponderEliminarUn abrazo
Cayetano diferenciar eso es lo que más le cuesta a la sociedad.
ResponderEliminarUn abrazo.
Roscanaria un abrazo muy fuerte.
ResponderEliminarAsí es amigo Javier. Un abrazo
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