Achuchar

Todos nos preguntamos ¿Por qué nos dejamos achuchar tanto por los Gobiernos de turno que desean a base de impuesto saldar sus gastos excesivos?.

Y es que una de las malas soluciones para esta crisis es abrasar con más y más impuestos con más y más subidas descomunales cualquier tipo de servicio, con céntimos sanitarios que pronto también serán educacionales o de investigación o de lo que deseen estos Gobiernos que siempre tienen un filón en los que se dejan achuchar a diario, que por desgracia somos unos cuantos.

Al rico como siempre hemos comentado en este rincón esto del achuchón por parte del Estado es algo innocuo que ni lo nota ni lo padece y que hasta le sirve para desgravar.

Al pobre como todos ustedes saben, no gasta por tanto poco más se le puede achuchar, bastante tiene si consigue pasar el día con una comida.

Y en el medio más de 17 millones de personas en España dispuestas a ser achuchados continuamente, son los que aún tienen trabajo, son los que aún tienen sueños de mejorar su situación y son aquellos que ven todas estas medidas necesarias para no bajar al escalón de pobres que tan cercanos los tienen. 

El Estado y cualquier Gobierno de cualquier color lo sabe bien, cuanto más achuchen a los que aún trabajan seguirán recaudando para seguir gastando, ese es el precio de soñar y las consecuencias del miedo por descender a un nivel social cada vez más extenso.

Eso sí amigos, igual estos achuchones tan continuos se acaban convirtiendo en abrazos asfixiantes que terminarán por romper la baraja y cambiar la mesa de juego tanto para un país como para los que aún soñaban con mejorar en su situación y están abocados a terminar en las listas de un INEM y por desgracia en un comedor social.

Mi abuela decía que los pobres son aquellos nietos de los ricos... ¿Será verdad?